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domingo, 30 de marzo de 2008

Enojada sin centro

Ufa! Hace días que intento escribir algo y no sé bien por donde empezar. Es una extraña sensación de movimiento circular; como el perro que no encuentra la cola antes de sentarse, todavía no encuentro donde acomodarme. Quisiera encontrar un pequeño sitio donde darle a cada situación el lugar que debe ocupar sin que sea una sola la avasallante, pero no puedo. El nivel de violencia y agresión que vivimos hace una semana me ha superado absolutamente. Y no hablo de colgarme en una discusión por defender alguna postura a ultranza sino por encontrarme en la posición contraria. La violencia se respira en la calle, en el super, a cualquier lugar donde vamos cualquier persona intenta sacar el tema para hablarte de lo mismo; del paro agropecuario, de los dirigentes, de los piqueteros, de los ricos que manejan el campo,de,de, de..basta! La sensación que me domina en esos momentos es la desazón. Creo que pocos, de todos aquellos que protestan, tienen la suficiente humildad para reconocer que lo único que les interesa es que el precio de los alimentos frescos vuelva a ser razonable y poder comer un churrasco con ensalada no sea un sueño en una noche de verano. Que les importa un carajo si la gente que labura en el campo se llena de guita, si se caga de hambre, si hay empleados en negro, si sufren más el rigor del clima, si tienen escuelas tan cerca como en cualquier ciudad, si su hijos pueden estudiar o no según su legitimo interés, y otros tantos "si" que hasta aburriría describirlos. Y tengo la sensación que se hubiera abierto la puerta de una gran terapia grupal donde nos hacen participar aunque no queramos. Los que alguna vez fuimos a terapia, yo lo hice en dos oportunidades para superar duelos muy profundos, saben que a veces uno llora por algo visible pero cuando se puede descorrer esa cortina hay otras cosas más complejas por resolver. Y ahí está el punto. La gente descarga su poderosa ira, en general, por la vida de mierda que se lleva, porque te encantaría superar esa sensación de vacío haciendo mierda la tarjeta y no podés, porque si tu marido te mete los cuernos quisieras hacerte una cirugía y mandarte a mudar pero no tenés suficiente guita, porque laburas todo el día en un puesto que no querés para mantener a tu familia y nadie te lo reconoce, porque te ves viejo y ni vos entendés que función cumplir en tu sociedad, porque sos adolescente y ya nadie te dice como hacer para que las cosas funcionen, y porque todos tenemos bronca, pero stop...se tiene que canalizar, sino protestás por cualquier cosa, en principio coherente, pero no es más que una excusa para empezar a las puteadas por todo. Tengo dos hijos adolescentes. Que les digo? que no crean en las instituciones? que el voto es una mentira que todos compramos como válida? que en manos de ellos está el cambio? Cuando era adolescente, como muchos, me encantaba creer que nuestra generación cambiaría las cosas. Nunca me interesó la política, pero sí analizar todo lo relacionado al tema social. Tengo amigos más comprometidos que sí estudiaron Ciencias Políticas para intervenir de lleno en el cambio, y saben qué? llegaron a estar allí, trabajando para algún senador por moneditas o ad honórem, soportando ser manipulados hasta se toparon con la gran pared de la realidad; para seguir debes manejarte "en un nivel tolerable de corrupción" sino..ahí tenés la puerta para que venga mi sobrina, mi hermana, o quien sea. Entonces, quisiera escribir como encontrar la vuelta para ver lo que merece ser visto e intentar no comprar opiniones de las que se venden en la góndola de la televisión. Pero es muy difícil. Intentando mantener la sonrisa los saludo y agradezco a quienes se han tomado el trabajo de escucharme hasta este último párrafo. Puf! y ufas.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Te acompaño en todas y cada una de tus palabras, querida Ada.
Tengo tu misma sensación y enojo.
Y aún más, estoy cerca de la gente del campo, que también es mi gente y mi tema, con el cual mi familia se gana la vida.
Nadie quiere esta forma de protesta, pero la "sordera institucional" se ha afianzado en nuestro país, y parece que la única manera de reclamo que atienden los funcionarios es ésta.

Me consta que NADIE ESCUCHA hasta que un piquete o forma similar, lleva cámaras y enfoca la situación. Desde un pequeño problema municipal, hasta el reclamo más importante. Es entonces, NUNCA ANTES, que se obtiene la atención: lamentable, primitiva, brutal forma de comunicarnos.

Luego vienen las descalificaciones, la violencia y el fraccionamiento social.

Es muy triste lo que pasa en nuestro país, querida amiga.

Mi abrazo para Vos.

Adolfo Calatayu dijo...

Adita querida: perdoname che,no sé que contestar...
cariños

Ada dijo...

Susana: por supuesto que la única forma en que te escuchen(o decidan atenderte) es metiendo presión con un piquete. No sé como, pero siempre alguno tuerce las cosas para beneficio propio. Se ha embarrado tanto la cancha que todos, los que protestan y los afectados, terminamos manipulados sin saber bien que pasa. Te mando un beso enorme Su y espero que las cosas se solucionen para los que buscan justicia.

Adolfo: a veces no saber es el mejor comentario, no le parece? Besotón

Anónimo dijo...

Ada,
No fue un trabajo escuchar tu justificada bronca.
No creo en las casualidades.
No creo que la decadencia de Latinoamérica sea obra de una conspiración astronómica.
Si a un pueblo lo privás de proteínas, salud y educación, lo tenés en la palma de tu mano.
¿Conocés algún país del continente donde esos tres derechos básicos funcionen correctamente y estén al alcance de todos?
No, no creo en las casualidades.
Un beso

Nicolás Lucca dijo...

Bueno, esto es algo que vengo diciendo hace rato ya.

La clase mediua argentina nunca reacciona por sí sola. Nunca. Antes pensaba que al menos cuando les tocas el bolsillo, te pueden llenar la plaza. Quedó demostrado que tampoco. Como prueba puedo citar el tiempo transcurrido desde la devaluación hasta la actualidad.

Por ende, si el campo protesta y todos se prenden en ello, uno puede pensar que estan en cualquiera, o finalmente darles la bienvenida a quienes vinieron a despertar al que se queja pero no protesta.

Al igual que en 2001 con el corralito, se calmaran los ánimos de la clase media de las grandes ciudades con un poquito de engañapichangas. El resto, cuando todos nos hayamos olvidado, seguirá igual.

Respecto del adolescente, si no cuestionan, están perdidos. Y hoy en día veo que los adolescentes no cuestionan nada. Y lo noto con referencia a mi generación, que terminamos el secundario hace menos de 10 años. No me quiero imaginar lo que serán dentro de 10 en el futuro.

Saludos!

Anónimo dijo...

Hace días que me viene pintando la bronquita también, pero trato de encontrar un centro para no andar cambiando piñas de lugar...
Los enojos de no encontrar respuestas o soluciones a tanta cuestión que nos rodea... tanto sordo o tanto que no quiere escuchar nos va complicando el ánimo ¿verdad?...
Además, como ¡¡hasta yo fui víctima del enojo ajeno en estos días!! prefiero mantener una calma que me permita pensar y llegar a conclusiones válidas...

Saludos con candor y en paz.

Ada dijo...

Tinez: y sí..yo tampoco creo que nada sea casual pero la solución parece estar siempre en la suerte, en el cosmos, o en manos de otro..y en las nuestras, no? Un besote enorme

Bruno: me encanta tu blog y tu forma de escribir, de hecho estos temas me resultan muy interesantes en tus palabras. Pero no puedo dejar de asombrarme la forma en que la gente es manipulada. Cuando en el 2001 salían a la calle yo pensaba "lo único que falta es que nos hagan creer que derrocamos un gobierno"..y no fue necesario pedirlo dos veces, tendré poderes de adivinación?ja,ja. Con respecto a los adolescentes, cuando yo egresé también nos criticaban mucho y esa gente,en aquel momento, tenía la edad que yo tengo hoy (35), creo que es una cuestión generacional. Pero sí los veo muy fanáticos en la defensa de una postura (por eso son adolescentes) y darme cuenta como son utilizados me enoja bastante. Realmente no sé donde estará la solución, seguramente yo también podría hacer algo pero ahora no puedo saber qué. Gracias por el aporte, siempre volveré a leerte para escuchar algo más que los medios. Saludos

Cando. si, si, ya anduve leyendo su situación "bronqueril". Esperemos que tanta mala energía no arruine nuestro espíritu. Le mando besos con saquitos de tilo!

Cecilia Gauna dijo...

Ada lo que escribiste me parece muy bueno y muy genuino.
Todo esto que pasa sirve para reflexionar sobre nosotros, las cosas que nos mueven , la información, la desinformación, el rebaño y uno parado ahi, sin demasiadas certezas o algunas pocas y una sensación de ser manipulado.
Yo pensé: hay verdades: gobierne quien gobierne, pase el tiempo que pase, los hospitales y las escuelas siguen sobreviviendo como pueden y los hambreados se multiplican junto la violencia.
y una pregunta: yo puedo hacer algo por esto? por mejorarlo?
si por ahora no tengo una respuesta clara, al menos no puteo, trato de informarme más profundamente y de noencenderle la mecha a nadie y no me gusta ver como se tira la comida que tanta falta hace, porque no creo que ninguna reivindicación por más valida que sea, justifica tamaña acción.
Me explaye, pero tu blog me generó esto
gracias
ceci

Anónimo dijo...

Lo importante es escuchar, es informarse, no dejarnos usar por nadie.

Aunque es muy difícil analizar cuando ves que no llegás para cocinar, cuando no te alcanza para el cospel, tenemos que ser conscientes de la postura que adoptamos y de las razones que nos llevan a eso.

Y por supuesto, respetar, al otro, a las instituciones, a uno mismo...

Es dura la vida...

Saludos y fuerza.

...

No a la verificación de palabra!